El modelo de intervención Desarrollo Rural de la Fundación Aurelio Llano Posada busca que las personas y familias campesinas construyan un camino al desarrollo rural sostenible a través de un proceso de planeación participativa y análisis colectivo del territorio, identificando sus capacidades endógenas y atendiendo sus debilidades. La metodología se centra en talleres participativos, herramienta donde la comunidad hace el análisis de su situación, de sus formas de organización, de sus sistemas productivos y de su entorno, y donde las personas manifiestan su sentir acerca del proceso. Con esto, se busca la construcción del territorio desde quienes lo viven y en esa medida las comunidades se apropian de sus realidades y ejecutan sus designios sobre el territorio, derrumbando el paradigma de la comunidad como receptora de contenidos y en su lugar, dibujándose como creadora y protagonista de su propio desarrollo.
Desde el 2012 la Fundación viene trabajando con su programa de Desarrollo Rural que actualmente tiene cobertura en veintidós (22) veredas que hacen parte de cinco (5) municipios del suroeste de Antioquia (Jardín, Támesis, Jericó, Pueblorrico y Fredonia) y trabaja con cinco (5) asociaciones campesinas, conformadas por cuatrocientos ochenta y un (481) asociados, de los cuales trescientos treinta y tres (333), el 69% son mujeres y ciento cuarenta y ocho (148) hombres.
Teniendo en cuenta lo anterior, la fundación trabaja de la mano con las asociaciones en el fortalecimiento comunitario y la generación de ingresos, ambas con miras a la sostenibilidad de las mismas. Adicionalmente se realiza un proceso de formador de formadores en otras veredas cercanas, buscado así, la expansión territorial del programa. Con esto se pretende que las organizaciones se constituyen en un agente cambio con capacidad de contar su experiencia, de replicarla, de mostrar lo que hicieron logrando adherir nuevas familias como un mecanismo de fortalecimiento de las capacidades individuales y colectivas para ir en el camino hacia la incidencia no sólo local sino regional.
Con estos procesos de expansión, se reafirman los postulados pedagógicos tales como la formación de formadores, la educación entre pares (de campesino a campesino), la formación para la acción y el aprender haciendo. Se pretende ampliar la cobertura de una manera organizada para generar gobernabilidad porque se parte de una base social establecida y una estructura organizacional representativa.
En todo este proceso ha sido fundamental el apoyo de aliados como la Fundación Sofía Pérez de Soto y la Fundación Fraternidad Medellín, quienes también le han apostado al desarrollo y al arraigo de las comunidades campesinas del suroeste antioqueño.