Diagnóstico de inserción productiva: Panorama de los retos y oportunidades de los jóvenes rurales y rurales dispersos en Colombia
En nuestro compromiso con el desarrollo de las zonas rurales del país, hemos trabajado junto a la Fundación Grupo Bancolombia y con el respaldo investigativo de la Fundación Interra para realizar un diagnóstico sobre la inserción productiva de los jóvenes rurales y rurales dispersos en Colombia. El diagnóstico abordó, entre otros aspectos, el estado de la Educación Posmedia en la ruralidad, el mercado laboral, las barreras existentes para la empleabilidad y el emprendimiento de los jóvenes rurales y las brechas de capital humano, asociadas a siete agrocadenas, priorizadas en virtud de su potencial de crecimiento.
Este análisis, que contó con la participación de diferentes entidades, gremios y universidades, así como las cerca de tres mil encuestas a jóvenes rurales, nos ha permitido identificar las diversas barreras que enfrentan en su vida cotidiana, evidenciando grandes retos tanto para ellos como para sus comunidades. En este artículo, compartimos los principales obstáculos identificados para el acceso de los jóvenes a oportunidades de desarrollo, los avances institucionales para el cierre de las brechas y la herramienta diseñada para poner la información al servicio del ecosistema, permitiendo la toma de decisiones y los ajustes a los diferentes programas con foco en la ruralidad.
Problemáticas generales: Los retos a los que se enfrentan los jóvenes de la ruralidad constantemente
Para abordar las problemáticas de los jóvenes campesinos, es esencial comprender la inserción productiva como el proceso que les permite integrarse de manera efectiva y sostenible en las actividades económicas del territorio, generando ingresos dignos, mejorando su calidad de vida y contribuyendo al desarrollo de sus comunidades.
En nuestro diagnóstico encontramos algunos puntos generales que son clave para entender el panorama al que se enfrentan los jóvenes:
* Baja competitividad agropecuaria: Limitaciones en el entorno para el desarrollo de negocios rurales, servicios de apoyo deficientes y mercados agrícolas imperfectos.
* Deserción educativa: Uno de cada tres jóvenes no culmina sus estudios superiores, principalmente por falta de recursos, la necesidad de trabajar o atender responsabilidades del hogar.
* Escasez de empleo formal: La informalidad laboral en zonas rurales alcanza el 86%, afectando especialmente a mujeres jóvenes y los ingresos mensuales de los jóvenes rurales no supera los $500.000.
* Déficit en formación y habilidades socioemocionales: Falta de competencias técnicas, digitales, manejo del inglés y discriminación por inexperiencia laboral, así como pocas habilidades sociales para enfrentarse a un proceso laboral.
* Vulnerabilidad ambiental y sanitaria: El cambio climático, problemas sanitarios y baja implementación de sistemas productivos afectan la productividad rural.
Estos retos exigen acciones alineadas con las vocaciones productivas locales, promoviendo empleabilidad, desarrollo sostenible y una integración activa de los jóvenes en sus territorios como líderes transformadores.
Diagnóstico general: Problemáticas y avances

En nuestro diagnóstico identificamos tres tipos de barreras que dificultan el acceso de los jóvenes rurales a empleos formales y al emprendimiento: individuales, organizacionales y del entorno. Las barreras individuales se relacionan con la falta o bajos niveles de educación, formación para el trabajo y competencias laborales, socioemocionales, técnicas y digitales, factores que limitan significativamente sus oportunidades laborales. Por otro lado, las barreras organizacionales se refieren a la discriminación que enfrentan los jóvenes debido a prejuicios o estereotipos de los empleadores, lo que afecta negativamente los procesos de selección. Finalmente, las barreras del entorno abarcan las condiciones adversas del territorio, como limitaciones económicas, institucionales y de movilidad, que profundizan la exclusión laboral.
Este diagnóstico pone en evidencia un desafío complejo que exige acciones integrales. Sin propuestas transformadoras y el compromiso activo de la comunidad, las posibilidades de inserción laboral formal para estos jóvenes seguirán siendo limitadas, prolongando ciclos de pobreza y exclusión social. Es vital trabajar en el fortalecimiento de competencias educativas, técnicas y digitales, así como en la sensibilización de empleadores para eliminar prejuicios y promover procesos más equitativos. Solo a través de esfuerzos conjuntos será posible reducir las desigualdades y abrir nuevas oportunidades para el desarrollo personal y profesional de los jóvenes rurales.
Una herramienta que permite usar la información del diagnóstico
Como parte de los resultados y aporte a las soluciones y cierre de las brechas de la ruralidad, fue diseñada la herramienta de visualización y usabilidad del diagnóstico.
Esta herramienta busca brindar insumos para caracterizar las necesidades productivas y educativas de los territorios y que tanto los jóvenes, como las instituciones de educación posmedia puedan incorporar información oportuna y cercana, en sus programas académicos y en la oferta educativa que se dispone para la ruralidad.
Asimismo se plantea un ejercicio prospectivo de las áreas del conocimiento o programas de formación que se requieren en el futuro en la ruralidad, buscando que los jóvenes puedan formarse en lo que efectivamente el mercado laboral requiere para fortalecer las agrocadenas.

Una receta para el fortalecimiento vocacional de los jóvenes

Para fortalecer este proceso de investigación y diagnóstico, hemos viajado por diferentes departamentos, compartiendo los resultados y complementando este ejercicio con las voces de quienes están en el ecosistema, construyendo conjuntamente, la receta ideal para la educación, con ingredientes pertinentes que permitan fortalecer la inserción de los jóvenes en áreas productivas de su territorio, apostando a un fortalecimiento vocacional y personal.
Invitamos a las personas a usar esta herramienta y compartirla para el crecimiento cognoscitivo del entorno rural que hoy nos rodea y las oportunidades y barreras existentes hoy para los jóvenes que aspiran a impulsar el desarrollo en su territorio.